¿Os gusta la pasta? Bueno… ¡¡a quién no!! Esta es de garbanzo y está preparada con un pesto vegano y bimi. Es sana, pero caprichosa a la vez ¡Os va a encantar! Se tarda poco en hacer y si no habéis hecho nunca pesto en casa ¡no se tarda nada! Os cuento cómo la hice:
Ingredientes (2 personas):
- 8 tallos de Bimi
- 20g de albahaca fresca
- 20g de espinacas frescas
- 30g de almendras crudas
- 1 diente de ajo
- 40ml de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de levadura nutricional
- 200g de pasta (yo usé de garbanzos)
- Sal y pimienta
Preparación:
Primero empezaremos por preparar el pesto. Necesitamos una picadora, robot de cocina o similar. Ponemos la albahaca, las espinacas, las almendras, el ajo, el aceite, la levadura nutricional y una pizca de sal. Trituramos hasta que quede una pasta más o menos homogénea. Si veis que os gusta un poco más ligera podéis añadir un poco más de aceite para que quede menos espesa.
Por ptro lado ponemos a hervir la pasta. Esta de es de garbanzos y tarda en hacerse unos 10 minutos, pero dependerá del tipo de pasta que uséis, revisad siempre las instrucciones del fabricante, o directamente id probando hasta que esté al punto que os gusta.
Cuando las pasta ya esté casi hecha, preparamos el bimi a la plancha. Si no lo habéis probado, es una mezcla entre el brócoli y un tipo de col oriental, kai-lán. Yo me he hecho una super fan (como del brócoli). Solo tarda unos 3-4 minutos en hacerse en la sartén, yo le pongo un poco de aceite de oliva y después sal y pimienta, y si tenéis, un poco de ajo en polvo.
Para presentarla yo lo he hecho de dos maneras, con la pasta y el pesto ya mezclada o dejando el pesto simplemente por encima y que cada uno lo mezcle en el propio plato, pero… ¡creatividad al poder!
Espero que os guste 😉
¡Que aproveche!